Kanagawa

Hola comunidad:

¡Hemos vuelto! Las vacaciones se acaban, volvemos a nuestros trabajos y los más jóvenes empiezan a preparar la vuelta a clase. Pero no todo son malas noticias, la vuelta del verano siempre trae muchas novedades en cuanto a juegos de mesa se refiere. Y en Gobelet hemos recibido hace muy poco un juego que nos ayudará a relajarnos en nuestra vuelta a la rutina, aprovechando el arte de la acuarela japonesa. Hoy hablamos de Kanagawa.

Kanagawa es un juego de 2 a 4 jugadores de 10 años o más, de una duración aproximada de 45 minutos en el que nos pondremos en la piel de unos estudiantes de pintura japonesa en el estudio del maestro Hokusai, y para tenerlo contento, nuestro cometido será pintar la obra más armoniosa posible.


Unboxing:

Abriendo la caja de Kanagawa vemos:

• Manual de instrucciones: el manual trae un montón de dibujos y ejemplos, por lo que no os asustéis que aunque parezca extenso, no es para tanto.
• Tablero: es muy original, ya que no es un tablero de juego de los que estamos acostumbrados, si no que es una esterilla de bambú, como las que nos ponen en los restaurantes de comida asiática. Está dividido en 12 casillas y 3 de ellas están ilustradas con unos pequeños muñequitos que nos indican donde colocar las cartas si la partida es de 2, 3 ó 4 jugadores.

• Cartas: 72 cartas en total, 18 de cada tipo. Los diferentes tipos son rojas o de personas, verdes o vegetación, azules o animales, y amarillas o edificios.

• Fichas de madera: encontramos diferentes tipos. Tenemos 15 pinceles, 1 peón de gran maestro y 1 peón de asistente. 
• Fichas de cartón troquelado: 4 losetas iniciales, una para cada jugador; 19 fichas de diplomas, de diferentes colores; y 3 fichas de tormenta.

Como siempre, se agradece que estos juegos que vengan en una cuna que nos ayuda a guardar los componentes sin que se pierda nada ni se estropee nada.

¡A PINTAAAAAAR!

Cómo Jugar:

Vamos a preparar la partida, ¡pinceles arriba!:

1. Desplegamos nuestro mantel... digo nuestro tablero.
2. El jugador que se haya elegido como jugador inicial tomará el peón de gran maestro.
3. Repartimos a cada jugador, de manera aleatoria, una loseta inicial. También obtendrán dos fichas de pincel.
4. Barajamos todas las cartas, sin separar sus tipos, dejándolas al alcance de todos los jugadores, junto con el resto de pinceles, fichas de tormenta, y los diplomas, estos últimos ordenados por números y colores.

Nuestro objetivo es crear un cuadro de 11 cartas, en este momento terminará la partida, aunque si el mazo de cartas termina, también finalizará la partida.

Kanagawa es un juego que transcurre por rondas y cada ronda se divide en 3 fases:

• Seguir las enseñanzas del maestro: el jugador inicial robará tantas cartas como jugadores haya en la partida (2, 3 ó 4) y las colocará en la fila superior del tablero. Si la casilla está en color rojo se colocarán boca abajo, mientras que si está en blanco, se pondrán boca arriba.
• Ampliar conocimientos o ponerlos en práctica: comenzando por el jugador inicial y siguiendo el orden de las agujas del reloj, cada jugador podrá elegir entre:

1. Poner en práctica conocimientos: elegirá una de las columnas del tablero y cogerá todas las que se encuentren en esa columna. Estas cartas las podemos colocar de dos maneras en nuestra loseta inicial, o bien las colocamos en la parte de arriba, lo que ampliará nuestra pintura; o bien en la zona de abajo, lo que mejorará nuestro estudio.
2. Ampliar conocimientos: cuando todos los jugadores han decidido ampliar sus conocimientos, colocamos más cartas en el tablero, según el número de jugadores.

• Una nueva lección: esta fase sólo se aplicará si algún jugador ha decidido ampliar conocimientos, o pasar, y no ha elegido ninguna columna. En ese caso, el jugador inicial robará cartas igual al número de jugadores que hayan pasado, y colocará cartas sólo en las columnas que no hayan sido elegidas. Una vez hecho esto, volveremos a la fase 2, hasta que todos los jugadores hayan elegido columnas, lo que ocurrirá cuando todas las casillas que se hayan podido rellenar con cartas lo hayan hecho, ya que será obligado que los jugadores elijan una de las columnas.

Para obtener los puntos de armonía y diplomas, tendremos que utilizar nuestras cartas en combinación con nuestra loseta inicial. Ya hemos comentado que las cartas pueden ser utilizadas para mejorar nuestra pintura o para mejorar nuestro estudio:

• Pintura: para mejorar nuestra pintura colocaremos las cartas que hayamos elegido en la fase de poner los conocimientos en práctica en la parte superior de nuestra loseta. Pero para poder hacerlo tendremos que pagar el coste. Para pintar gastaremos uno de nuestros pinceles y lo colocaremos en el hueco que tiene la loseta inicial en la parte inferior. Además, tenemos que cumplir la condición del icono que marca nuestra loseta inicial, es decir, el icono que marca tiene que coincidir con el icono de la carta que hayamos obtenido previamente. A medida que vayamos ampliando nuestro estudio podremos ampliar nuestras posibilidades, tanto de número de pinceles, como de temas en nuestra pintura. Alguna de las cartas tienen dos símbolos iguales, esto nos indica que tendremos que usar dos pinceles para poder pintarlas.

• Estudio: si colocamos las cartas que hayamos obtenido en la parte inferior de nuestra loseta inicial (la zona marrón), mejoraremos nuestro estudio. Ya os he comentado arriba que la mejora de nuestro estudio permitirá poder obtener más pinceles y temáticas para nuestra pintura. Para conseguir pinceles, tendremos que colocar una carta que tenga el símbolo del pincel en ella; mientras que si colocamos cartas con diferentes temáticas, ampliaremos nuestras posibilidades a la hora de elegir que cartas adherir a nuestra pintura. Con la mejora del estudio también tendremos la posibilidad de colocar una carta con el dibujo de la ficha del asistente. Esto nos servirá para conseguir el peón de asistente, que indica que cuando acabe esta ronda, el jugador que tenga este peón se convertirá en el gran maestro y por lo tanto, en el jugador inicial. El icono de la mano con una carta, nos permitirá guardarnos una de las cartas que hayamos elegido para la siguiente ronda. El icono de las flechas nos permite mover uno de nuestros pinceles a otro icono de temática, para poder pintar otra parte del cuadro. Algunas de las cartas tienen iconos de flor, estos iconos nos quitarán puntos de victoria al final de la partida si las hemos utilizado en el estudio.

Siempre que coloquemos una ficha en nuestra pintura o en nuestro estudio, optaremos a un diploma. Podemos tomarlo o no. En el caso de que lo tomemos, no podremos optar a ningún diploma más de ese tipo, es decir, que cuántas más cartas de un tipo hayamos elegido, más puntos obtendremos, pero si tardamos demasiado en coger nuestro diploma, nuestros rivales se nos pueden adelantar... Cuánta duda señor...

Tipos de diplomas:

1. De pintura: en la parte superior nos muestra los puntos de victoria que nos darán a final de la partida. En la inferior, los requisitos que nos piden para obtener ese diploma. Además, algunos diplomas ofrecen un efecto inmediato, como la obtención de una ficha de tormenta, un pincel o el peón del asistente. 
2. De estudio: al igual que en los de pintura, nos indican los puntos, los requisitos y los efectos inmediatos que tenemos al conseguir cada uno de los diplomas.

Como os he comentado anteriormente, el juego finaliza cuando uno de los jugadores tenga 11 cartas de pintura en su cuadro, se haya terminado el mazo de cartas. En ese momento, pasamos a la puntuación:

• Obtendremos 1 punto por cada carta que forme nuestro cuadro.
• Obtendremos 1 punto por cada carta de la misma temática que se encuentren seguidas en nuestro cuadro. Las fichas de tormenta, nos ayudan a cambiar la temática, por lo que podemos usarlas como comodines al final de la partida.
• Sumaremos 1 punto por cada icono de flor (o de armonía) que tengamos en nuestra parte de la pintura, peeeeeeero le restaremos uno por cada icono de este tipo que tengamos en nuestra zona del estudio.
• Obtendremos 2 puntos si tenemos, al final de la partida, al peón del gran maestro.
• Sumaremos los puntos indicados en nuestros diplomas.

En el momento que hayamos sumado todos estos puntos, el jugador, o los jugadores (en caso de empate) que más puntos tenga, ganará la partida de Kanagawa y el reconocimiento de nuestro maestro Hokusai (o Hoku para los amigos).

Visualmente, Kanagawa es uno de los juegos más bonitos del panorama actual, no esperábamos menos de un juego basado en pintura japonesa, pero no sólo es un juego bonito, también tiene una parte estratégica muy importante, ya que tenemos muchas opciones en cada partida y hay que estar muy atento en las posibles combinaciones que hay. Además, los diplomas ofrecen una parte de tensión al juego, ya que tienes que elegir con quedarte el primero que puedas, no sea que te quedes sin ninguno.

Pues ya hemos vuelto, como habéis podido observar, con mucha energía y muchas ganas. Como siempre, os informaremos aquí de juegos que podéis encontrar en Gobelet, y os invitamos a que los probéis en nuestra ludoteca. Un saludo y hasta la semana que viene.