Hoy, desde Gobelet, venimos a hablaros de los juegos de cartas, pero destinados a los más pequeños de la casa. Los juegos de cartas tienen muchísimas ventajas, son fáciles de almacenar, nos los podemos llevar a cualquier sitio, son rápidos de preparar, y para los fabricantes, baratos de fabricar, lo que también determina el precio final. Si estáis buscando una buena y divertida manera de crear un vínculo de ocio con vuestros hijos, estos son varios de los juegos de cartas que más gustan.
Virus
Virus es un juego de 2 a 6 jugadores mayores de 8 años, en el que nos ponemos en la piel de unos cirujanos para crear un cuerpo sano antes que el resto de nuestros rivales, pero no será sencillo ya que habrán intercambio de órganos, ladrones, virus e incluso fallos médicos que nos torpedearán nuestras intenciones de conseguir 4 órganos sanos.
Además de divertirnos, Virus nos ayuda a conocer un poco más del cuerpo humano.
Sushi Go!
Una de las maneras más típicas de los juegos de cartas es la modalidad de draft. El draft consiste en elegir una de las cartas que tenemos y pasar el resto a los jugadores de nuestro lado, creando combinaciones que nos permitan ganar puntos.
De 2 a 5 jugadores a partir de 8 años, Sushi Go! ayudará a los niños a tener una mayor agilidad visual y de paso les adentrará en la comida japonesa.
Exploding Kittens
El concepto de Exploding Kittens es tremendamente sencillo: piensa en la ruleta rusa pero con gatos bomba y ya tienes una idea muy acertada de que va este juego de cartas. Los jugadores tienen que intentar desactivar a los gatitos. El objetivo es prevenir que los pequeños y tiernos gatitos se detonen y acaben contigo.
Aunque haya gatos explotando, es un juego que nos ayuda a tener un sentimiento animalista. Desde los 7 años y para 2 a 5 jugadores.
Uno de los juegos varias veces comentados en este blog. Mecánica muy sencilla, pero muy adictiva, solamente una figura se repite en cada una de las tarjetas y tenemos que ser los más rápidos en ver cuál es. Existen muchos modos de jugar a Dobble, para que no todas las partidas sean iguales.
De 2 a 6 jugadores, a partir de 6 años. Dobble nos permite mejorar nuestra agudeza visual y nuestros reflejos.
Todos los juegos de mesa tienen sus reglas, en este, se nos invita a romperlas. Nuestro objetivo es quedarnos sin mano y para ello podremos usar las triquiñuelas más rebuscadas para conseguirlo.
De 3 a 5 jugadores, desde los 7 años de edad, nos hará ver que, en ocasiones, saltarnos las reglas nos lleva a los objetivos. Muy adictivo y traerá risas a toda la casa.
Los juegos de cartas son increíblemente efectivos para generar una cultura sana del juego de mesa en los más pequeños. Y si nuestra intención es buscar esa sintonía con los más pequeños, cualquiera de estos de los que hemos hablado hoy, os valdrá, pero tenemos muchos más por si buscáis algo diferente. Hasta la semana que viene.